El Instituto de Biomecánica (IBV) y Kelme han diseñado un prototipo de zapatillas de running, dentro del proyecto 'Runsafer', con un dispositivo integrado que permite a los deportistas planificar mejor su entrenamiento y evitar posibles lesiones durante la práctica deportiva, según ha informado la entidad en un comunicado.
La gran novedad del nuevo sistema frente a los actuales de medición y entrenamiento para corredores es que es el primer dispositivo que caracteriza la técnica de carrera a partir de parámetros biomecánicos y, junto con la información del pulsómetro, "detecta la fatiga y facilita recomendaciones al usuario en tiempo real para evitar la aparición de lesiones y para mejorar su rendimiento".
El dispositivo consiste en un sistema de medición microelectrónico que es capaz de registrar parámetros biomecánicos que caracterizan la técnica del corredor durante la carrera. Esta información se transmite de forma inalámbrica al teléfono móvil del runner mientras practica deporte, donde una aplicación le informa "en tiempo real" de la actividad planificada y el nivel de rendimiento.
La aplicación móvil además cuenta con toda la información adicional proporcionada por otros dispositivos comerciales empleados habitualmente por los corredores como el pulsómetro o la localización GPS. El deportista puede descargar toda la información generada en un portal web que contará con una aplicación especializada de planificación del entrenamiento online, que generará distintos planes de entrenamiento según el nivel del corredor. A partir del análisis de la biomecánica de la carrera, la aplicación ofrecerá recomendaciones "de ajuste" en el plan de entrenamiento con el objetivo de mejorar el rendimiento del corredor y prevenir la aparición de lesiones.
Además, esta web incluirá las funcionalidades propias de las redes sociales online, que permiten al usuario "estar en contacto con corredores de todo el mundo y compartir otros contenidos como rutas para correr o información del calzado más idóneo". Futuras colecciones de la empresa Las pruebas técnicas se han realizado con el actual calzado de Kelme (modelo Gravity) y, "dado su éxito", la empresa está adaptando industrialmente el producto "para que pueda llegar al mercado en futuras colecciones".
El proyecto 'Runsafer' es una iniciativa europea del VII Programa Marco de la Comisión Europea, financiada a través del programa de Investigación para pymes. El Instituto de Biomecánica acoge este viernes la reunión final de este proyecto en el que también han participado los centros tecnológicos IPMS-Fraunhofer y EII, además de las empresas Dukosi y Nuromedia. El número actual de corredores en Europa supera los 80 millones; aproximadamente el 36 por ciento de la población europea entre 15 y 65 años, ha indicado el IBV, que ha añadido que correr se ha convertido en uno de los deportes "más populares y con mayor número de adeptos en los últimos años".
Sin embargo, la práctica de este deporte lleva asociada la aparición de lesiones que obligan al corredor "a parar la actividad y perder el nivel de forma conseguido hasta su recuperación o incluso en algunos casos, abandonar la práctica". De hecho, señala que la incidencia de las lesiones en corredores es muy alta y un 38 por ciento de los corredores europeos sufre o ha sufrido alguna vez una lesión asociada a la práctica deportiva y entre un 37 y un 56 por ciento de los corredores se lesiona al menos una vez al año. En este sentido, e desarrollo del sistema Runsafer está dirigido en general a todos los corredores europeos, pero en particular a todos aquellos que han sufrido lesiones en el último año, lo que supone un total de más de 37 millones de potenciales consumidores.
Fuente: http://www.20minutos.es/