Un etíope reinó en la Maratón de Nueva York. Lelisa Desisa es un corredor de 28 años y con unas cualidades especiales para los 42.195 metros como demostró al ser uno de los tres seleccionados (junto a Tadese y el plusmarquista Kipchoge) para el proyecto Breaking 2, que una marca comercial hizo para romper la barrera de las dos horas. Desisa, de la etnia oromo, ya había demostrado su calidad en una major, porque ganó en Boston en 2013 y 2015, pero no era el favorito. Las miradas apuntaban a Kamworor, ganador de 2017 y primero en las apuestas como Mary Keitany en mujeres, que no falló y ganó por cuarta vez en la Gran Manzana.

Se dio la salida masculina en el Puente de Verrazano, tranquila, sin liebres y junto a la masa de más de 50.000 populares que cumplen sus sueños en esta icónica carrera. Pero otro etíope, Shura Kitata se empeñó en animar la carrera y hacer de liebre oficiosa. Con tirones y cambios de ritmo llegaron los favoritos a la media maratón en 1h 03:55. Las zonas hipsters, Brooklyn y Williamsburg, estaban superadas para un quinteto formado por Kitata, Desisa, Kamworor, Tola y Talam. Cuatro etíopes y un keniano se jugarían la victoria.

El asalto final llegó en el Bronx. Kamworor aceleró y primero se quedaron Talam y Tola. Al sobrio compañero de entrenamientos de Kipchoge, que corrió con un gorro, sólo le quedaba eliminar a Desisa y Kitata. Kitata, segundo este año en Londres, se quedó, pero Desisa, también con la cabeza cubierta aguantó. Keniano y etíope se la tenían que jugar en Central Park. Se quitaron los gorros por el fragor de la afrenta. Kamworor seguía con su ataque largo, pero Desisa no cedía y se marchó directo al triunfo en la Gran Manzana, por la Quinta Avenida, en el Upper East Side y a Central Park, logró su victoria con 2h 05:59, un crono excelente para ir sin liebres. El segundo en la historia de Nueva York, tras él llegó Kitata y después un fundido Kamworor, 1h 02:02 la segunda media de Desisa.

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