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Basilio García, “Corredor Escoba” del Maratón Alpino Madrileño, sufrió un infarto cerebral que le inmovilizó la mitad de su cuerpo. El 8 de marzo empezó un reto: 42 km en 21 días. Basilio está decidido a conseguirlo y en la pista de atletismo de Segovia corre cada día arropado por su familia, sus amigos y todos aquellos que le demuestren su cercanía.
Ayudado por su inseparable bastón y con paso firme, corre por el anillo interno y cada vez que los demás corredores le pasan cerca le animan a seguir.
Hace 3 años le dio un infarto celebrar, seguido por un ictus apopléjico que le dejaron en la cama con pocas esperanzas de recuperar su movilidad. Pero Basilio no se ha dejado llevar por su situación y ha decidido luchar, poniéndose pequeños y constantes objetivos: muchas horas de fisioterapia, gimnasio y hasta de natación le han llevado a este gran objetivo de volver a recubrir los tantos queridos 42 km del Maratón.
Este gran hombre se ha ganado el cariño y la estima de los demás corredores populares porque ha sido (y siempre será), el Corredor Escoba del Maratón Alpino Madrileño, aquel corredor que se ocupa de recuperar todos aquellos que se quedan atrás o fuera de control.
En honor a su labor y a su persona el “Club Tierra Trágame”, organizador del evento, le reserva su inseparable dorsal, el nº 300; aunque ahora asiste como espectador, con el espíritu está participando también junto a los demás.
Durante la prueba tendrá 2 liebres de lujo: Javier Guerra, subcampeón de España de Cross y Raúl García Castán, 5 veces campeón de España de Carreras por Montaña, ambos segovianos.
Será cuidado también por los fisioterapeutas Teresa García y Daniel Bravo que durante las 3 semanas le seguirán atentamente. ¡Animos, Basilio!
Fuente: Runners
