El descanso es un proceso del entrenamiento vital para tu progreso como corredor. Existen diferentes tipos de descanso. Hoy conversaremos sobre el descanso activo y pasivo.

El descanso activo, también conocido como ‘descanso de recuperación’ (recovery run, en inglés) se trata de realizar una ligera actividad física en lugar de realizar un descanso abrupto entre los entrenamientos.

Existe una gran diferencia entre el descanso activo y pasivo. El descanso pasivo consiste en no hacer ningún tipo de actividad física con la intención de darle un respiro a tus músculos. Mientras que, el descanso activo sería una forma de descansar, pero no del todo.

Si en tu día de descanso consigues incluir una actividad física ligera (como un calentamiento ligero) tus músculos probablemente se recuperen más rápido. Al menos, con más rapidez que si los dejaras inactivos completamente.

Beneficios del Descanso Activo

El descanso activo te ayudará a darte un respiro entre entrenamientos, pero sin quedarte sin moverte.Dentro de los beneficios más importantes del descanso activo están:

• Reducirás el riesgo de padecer lesiones.
• Le darás tiempo a tu cuerpo para que se relaje y se reponga.
• Mejorarás el rendimiento en carrera.
• Mejorarás la fuerza en ejercicios posteriores.
• Aumentarás la segregación de hormonas anabólicas.
• Evitarás el riesgo de sobreentrenamiento.

Momentos conveniente para realizar descanso activo

Si quieres mantener tu condición física o estás preparando una carrera, es recomendable que realices al menos uno o dos descansos activos a la semana. 

Es un error pensar que la clave del éxito de un corredor consiste en entrenar duro todos los días de la semana sin descanso. Con esto posiblemente solo conseguirás caer en el sobreentrenamiento y una posible lesión. El descanso activo puede ser tu mejor opción.

Cosas que puedes hacer en tu descanso activo

Por mucho que te guste correr, hay otras actividades físicas que también puedes practicar para seguir ejercitándote y a la vez desconectar.

Bicicleta

Es una opción estupenda para seguir entrenando cardio y a la vez disfrutar de nuevas rutas junto con tu familia o amigos. Lo más aconsejable es que no lleves un ritmo demasiado elevado ni elijas rutas que incluyan duras cuestas en tu itinerario.

Piscina

La natación te ayudará a relajar los músculos y es un buen ejercicio para aprender a controlar y trabajar la respiración. Nada tranquilamente, sin tiempos ni distancias establecidos y disfruta de tu día de descanso.

Senderismo

Como ya sabes, andar es una de las prácticas más saludables para reforzar tu salud cardiovascular. Descubrir nuevas rutas de senderismo puede convertirse también en una afición muy saludable y divertida.

Recuerda que…

Sea cuál sea el deporte o el ejercicio que elijas para realizar tu descanso activo, no debe ser de gran impacto. Se trata de descansar, no de seguir entrenando como siempre. Este entrenamiento de recuperación aporta oxígeno y nutrientes a los músculos y no es un ejercicio pensado para aumentar ni la fuerza ni la resistencia. Por lo tanto, el ritmo siempre deberá ser suave, lento y ligero.

¡Considera el descanso activo!

Definitivamente que el descanso activo puede ser una alternativa muy buena para que te recuperes más rápido y tu rendimiento sea el más efectivo. Recuerda que no hay descanso activo sin descanso pasivo y que tus horas de sueño y descanso también deben combinarse con tus entrenamientos.

Lo que se persigue es mejorar como corredor, pero siempre evitando el riesgo de lesiones o de sobre entrenamiento. Así que, ¡tómate un descanso! Y si es activo, ¡Mucho mejor!.

-Escuela de Running