- Correr rápido todos los días.
Este es uno de los errores que comenten muchos corredores, no tolerar los trotes suaves, que tienen la misma importancia en nuestro desarrollo que las corridas de velocidad. Un trote suave, tiene como fin construir una base y sólida que nos prepara para los entrenamientos de velocidad a parte de que nos recupera de los entrenamientos fuertes. No quieras llevar el ritmo de otra persona, lleva el tuyo y optimiza tus entrenamientos.
- No descansar.
El temido descanso, piensas que por descansar uno o dos días a la semana no vas a poder alcanzar tu meta, sin entender que eso es lo que te puede alejar más de tu meta. Con el descanso se recupera el cuerpo de cada uno de los entrenamientos, el descanso es necesario y es parte del entrenamiento. La falta de descanso provoca que el cuerpo llegue al estado de “meseta” que impide que puedas avanzar. Planea tu descanso y cuida tus horas de sueño igual como planeas tus corridas de fondo.
- Entrenar en horas del medio día para sudar más y adelgazar más.
¡Craso error! El cuerpo se va calentando mientras realizamos cualquier actividad física y el sudor es la forma de refrigerar el cuerpo y contrarrestar el calor que estamos generando. Buscar un exceso de sudoración lo que puede hacer es deshidratarnos más. Trata de entrenar en climas más frescos y siempre cuida tu hidratación mientras entrenas. Si buscas adelgazar, combina tus entrenamientos con una buena alimentación.
- Comprar tus zapatillas de correr sólo por el color.
Al momento de comprar zapatillas de correr, hay muchos factores que influyen en tu elección. Tu peso, el tipo de terreno en que vas a correr, tu tipo de pisada, la estructura de tus pies. Lo ideal es que acudas a una tienda especializada donde puedan brindarte la mejor asesoría. Una recomendación es que te realices un análisis de pisada y determinar cual es el tipo de calzado adecuado para ti.
- No llevar una alimentación adecuada.
La alimentación es una de las herramientas más importantes para desarrollar entrenamientos exitosos. De los alimentos es que el cuerpo saca la energía para responder a los requerimientos mientras corremos, un desequilibrio nutricional te puede llevar al fracaso en el running. Lo ideal es llevar una correcta alimentación según la carga de tus entrenamientos.