SANTO DOMINGO. Para el empresario Ballardo Mejía Alvarado, en su condición de presidente del Grupo Mejía Alcalá, la unión de su famoso producto, Milex, con el no menos famoso Luguelín Santos, constituye una alianza de corte internacional, en donde el deporte y la nutrición van de la mano.

Para ello, el Grupo Mejía Alcalá, con la finalidad de ampliar el liderazgo de su marca en el mercado, tiene a Luguelín, el mismo que logró la medalla de plata en los 400 metros de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, como el protagonista de los valores Milex. Nacido en 1993 en Bayaguana, Monte Plata, Santos creció en una familia de escasos recursos, lo que no ha constituido freno alguno para demostrar, a nivel mundial, su talento en el atletismo.

Esto, pese a que la mayoría de las veces, el hoy medallista olímpico, no tenía dinero para comprar zapatos deportivos, lo que lo llevaba, en su afán de convertirse en un héroe, a practicar su adorado deporte, descalzo.

"Creemos en Luguelín, el muchacho de diecinueve años, cuya medalla de plata ha cambiado su vida, por eso hemos creado una alianza con él, como embajador de la marca Milex, en nuestro interés de, a través del deporte, promover los valores que por más de medio siglo el Grupo Mejía Alcalá ha mostrado en el mercado nacional e internacional", sostiene Mejía.

Y agrega: "Hoy día, Santos ya sabe lo que es volver a casa como héroe olímpico, ya que, además de su recordada participación en Londres, en el 2010 conquistó dos oro en los Juegos Olímpicos de la Juventud, en Singapur, ocasión en la que, al igual que el año pasado, su pueblo le brindó un recibimiento por todo lo alto".

Por eso, sus vecinos, sus amigos, las personas que le vieron crecer y correr por los montes sin entender para qué, y todo el que ha visto su desempeño como atleta, celebran su historia de triunfos, con un norte prometedor.

"Había veces que iba con el mismo pantalón, con los zapatos rotos, pero eso no fue obstáculo para continuar, pues con el esfuerzo y el apoyo de mi familia, lo fui consiguiendo, siempre diciéndome a mi mismo, yo puedo, yo puedo", señala Santos, al destacar también que su alianza con Milex constituye un prestigio y un trofeo a su perseverancia.

Destaca Luguelín que, si el etíope Abebe Bikila fue capaz de ganar un maratón olímpico descalzó, en 1960, en Roma, él también saldrá adelante con el "yo puedo, yo puedo" que le inculcaron desde pequeño.

Sobre la alianza con Santos, Randolph Luna, gerente de mercadeo corporativo del Grupo Mejía Alcalá, destaca que "como un símbolo de nutrición, presente por unos sesenta años, reforzando valores, son estas acciones, como el acuerdo con nuestro medallista olímpico, lo que hace que Milex sea la leche preferida por los dominicanos".

Luna apunta que "el objetivo de la marca con esta iniciativa es proyectar por medio de la imagen de Luguelín Santos a familias satisfechas, con niños y jóvenes saludables, además de promover el espíritu de lucha, la solidaridad, el esfuerzo y la perseverancia".